Fácil de usar
Fácil de usar describe un dispositivo de hardware o software interfaz. Eso es fácil de usar. Es "amigable" para el usuario, lo que significa que no es difícil de aprender o comprender. Si bien "fácil de usar" es un término subjetivo, los siguientes son varios atributos comunes que se encuentran en las interfaces fáciles de usar.
- Sencillo. Una interfaz fácil de usar no es demasiado compleja, sino que es sencilla y proporciona un acceso rápido a funciones o comandos comunes.
- Limpiar. Un bien interfaz de usuario está bien organizado, lo que facilita la localización de diferentes herramientas y opciones.
- Intuitivo. Para que sea fácil de usar, una interfaz debe tener sentido para el usuario promedio y debe requerir una explicación mínima sobre cómo usarla.
- De confianza. Un producto poco confiable no es fácil de usar, ya que causará una frustración excesiva para el usuario. Un producto fácil de usar es confiable y no funciona mal ni se bloquea.
El objetivo de un producto fácil de usar es proporcionar una buena experiencia de usuario (o "UX"). Esto puede verse diferente dependiendo del usuario final para quien el producto está diseñado. Por ejemplo, un juego para niños fácil de usar tendrá una interfaz muy diferente a la de un profesional CAD programa. Sin embargo, las reglas anteriores se aplican a ambos tipos de programa.. Incluso si un programa tiene muchas características avanzadas, aún es posible hacerlo fácil de usar mediante el diseño de una interfaz simple, limpia e intuitiva.
Los productos fáciles de usar suelen ser más exitosos que aquellos con interfaces complejas y complicadas que son difíciles de usar. Además, los clientes a menudo evitan productos poco confiables, como programas de software que están llenos de loco. Para garantizar una buena experiencia de usuario, las empresas a menudo prueban exhaustivamente sus productos antes de lanzarlos al público.