El principio de mínimo privilegio (POLP) es un principio de seguridad que establece que los usuarios (y los programas que actúan en nombre de los usuarios) deben recibir el menor número de permisos posible. El fundamento de este principio es que al reducir el número de permisos que tiene un usuario, se reduce la posibilidad de que ese usuario haga un mal uso de sus privilegios.
Una manera de pensar en el principio del menor privilegio es en términos del viejo adagio, "dale a un hombre un pez y lo alimentarás por un día; enséñale a pescar y lo alimentarás por toda la vida". En el contexto de la seguridad, esto significa que es mejor dar a un usuario los permisos mínimos que necesita para hacer su trabajo, en lugar de darle todos los permisos y confiar en que utilice esos permisos de forma responsable.
El principio del mínimo privilegio es a menudo difícil de aplicar en la práctica, ya que puede requerir una gran cantidad de trabajo previo para entender adecuadamente qué permisos necesita realmente un usuario. También puede ser difícil cambiar los permisos una vez que un usuario se ha acostumbrado a tener un determinado nivel de acceso. Sin embargo, los beneficios del principio de mínimo privilegio son claros: al reducir el número de permisos que tiene un usuario, se reduce el riesgo de que haga un mal uso de sus privilegios y cause daños al sistema.
¿Qué significa "menos privilegios"?
Como el nombre sugiere, "menos privilegio" se refiere a tener menos permisos de los que un usuario tendría normalmente. En el contexto de la ciberseguridad, esto suele significar tener menos permisos para acceder a datos sensibles o realizar ciertas acciones.
Hay algunas razones por las que alguien podría querer implementar menos privilegios en su organización. En primer lugar, puede ayudar a prevenir las fugas de datos accidentales o el mal uso de la información privilegiada. Si un usuario sólo tiene acceso a los datos que necesita para hacer su trabajo, es menos probable que accidentalmente filtre información sensible.
En segundo lugar, menos privilegios también pueden ayudar a limitar el daño que puede hacer un usuario malicioso. Si un usuario sólo tiene permisos limitados, no podrá realizar ciertas acciones que podrían ser perjudiciales para la organización, como borrar archivos críticos o acceder a datos sensibles.
Por último, menos privilegios también pueden dificultar que un atacante acceda a datos sensibles o realice ciertas acciones. Al limitar los permisos de los usuarios, se hace más difícil para un atacante escalar sus privilegios y obtener acceso a información sensible.
En general, menos privilegios es una buena manera de mejorar la seguridad de su organización. Al limitar los permisos de los usuarios, puedes ayudar a prevenir fugas de datos accidentales, limitar el daño que puede hacer un usuario malintencionado y hacer más difícil que un atacante acceda a datos sensibles.
¿Qué significa el principio de separación de privilegios?
Según el principio de separación, no se debe permitir a un usuario hacer más de lo necesario para cumplir con su trabajo. Esto se hace para limitar el daño que puede causar un usuario malintencionado, ya que sólo podrá realizar acciones que estén directamente relacionadas con su trabajo, y no podrá acceder a información sensible o realizar acciones que puedan causar daño al sistema. Este principio suele aplicarse dando a los distintos usuarios diferentes niveles de acceso al sistema, de modo que un usuario malintencionado sólo pueda acceder a las partes del sistema que necesite para realizar su trabajo, y no pueda acceder a información sensible o realizar acciones que puedan dañar el sistema.
¿Cuál es la diferencia entre los privilegios de mínimo acceso y los privilegios de acceso más adecuados?
La principal diferencia entre los privilegios de acceso mínimos y los privilegios de acceso óptimos es que los privilegios de acceso mínimos significan que un usuario sólo tiene los permisos necesarios para realizar su trabajo, mientras que los privilegios de acceso óptimos significan que un usuario tiene los permisos necesarios para realizar su trabajo, así como cualquier otro trabajo que pueda hacer.
Los privilegios de acceso mínimos son la más segura de las dos opciones, ya que limitan la cantidad de daño que puede hacer un usuario malintencionado. Privilegios de acceso óptimos es menos segura, ya que da a los usuarios más permisos de los que necesitan, lo que podría ser aprovechado por un usuario malintencionado.