El software de gestión de activos es un tipo de software que ayuda a las organizaciones a rastrear y gestionar sus activos. Puede utilizarse para hacer un seguimiento de los activos tanto físicos como digitales, y puede ayudar a las organizaciones a hacer un seguimiento de dónde se encuentran sus activos, quién los utiliza y cómo se utilizan. El software de gestión de activos también puede ayudar a las organizaciones a gestionar y supervisar los ciclos de vida de los activos, y a asegurarse de que éstos se utilizan de forma eficaz y eficiente.
¿Cuáles son los tipos de gestión de activos?
Existen cuatro tipos de gestión de activos: gestión estratégica de activos, gestión operativa de activos, gestión financiera de activos y gestión de riesgos.
La gestión estratégica de activos es el proceso de toma de decisiones sobre qué activos adquirir, cómo asignar los recursos entre esos activos y cómo deshacerse de ellos cuando ya no son necesarios. La gestión operativa de activos es el proceso de garantizar que los activos se operan y mantienen de forma segura, fiable y rentable. La gestión de activos financieros es el proceso de tomar decisiones sobre cómo financiar la adquisición y el funcionamiento de los activos. La gestión de riesgos es el proceso de identificar, evaluar y gestionar los riesgos para la consecución de los objetivos de la gestión de activos.
¿Qué es la gestión de activos ITIL?
La gestión de activos ITIL es un proceso para gestionar el ciclo de vida de los activos físicos y lógicos de una organización. Esto incluye el seguimiento, el mantenimiento y la eliminación de los activos de manera que se maximice su valor para la organización.
El objetivo de la gestión de activos de ITIL es garantizar que los activos de la organización se gestionen y utilicen adecuadamente de forma que apoyen los objetivos empresariales de la organización. Para lograrlo, la gestión de activos debe integrarse con otros procesos como la gestión de incidentes, la gestión de cambios y la gestión de lanzamientos.
La gestión de activos ITIL cubre una amplia gama de temas, incluyendo:
Identificación de activos
Clasificación de activos
Inventario de activos
Seguimiento de activos
Gestión del ciclo de vida de los activos
Eliminación de activos
Los beneficios clave de la gestión de activos ITIL son:
Mejora de la utilización de los activos
Reducción de costes
Mejora de la toma de decisiones
Mejora de los niveles de servicio
Reducción del riesgo
¿Cuáles son los 3 métodos que se utilizan para gestionar la gestión de activos?
1. Asignación de activos: Es el proceso de decidir cómo distribuir los activos (cartera de inversiones) entre las diferentes clases de activos (por ejemplo, acciones, bonos, bienes inmuebles, efectivo, etc.). El objetivo de la asignación de activos es diversificar sus inversiones para no estar demasiado expuesto a una clase de activos o inversión en particular.
2. 2. Gestión del riesgo: Es el proceso de identificar, evaluar y gestionar los riesgos de su cartera de inversiones. La gestión del riesgo es importante porque puede ayudarle a evitar pérdidas y a maximizar los beneficios.
3. Reequilibrio de la cartera: Es el proceso de ajustar periódicamente la combinación de activos de su cartera de inversión. El reequilibrio puede ayudarle a mantener su cartera alineada con sus objetivos de inversión y su tolerancia al riesgo.
¿Qué es la gestión de activos terminológica?
La gestión de activos terminológicos es el proceso de identificar, catalogar y gestionar la terminología utilizada en una organización. Esto incluye garantizar que la terminología es precisa, está actualizada y es coherente en todos los departamentos y unidades de negocio.
Las organizaciones utilizan la gestión de activos terminológicos para mejorar la comunicación y la colaboración, reducir los costes y minimizar los riesgos. Al disponer de un repositorio centralizado de terminología, las organizaciones pueden garantizar que todo el mundo utiliza el mismo lenguaje y que existe una clara comprensión del significado de los términos. Esto puede ayudar a evitar malentendidos y errores, y puede facilitar el intercambio de información y conocimientos en toda la organización.
La gestión de activos terminológicos puede utilizarse para cualquier tipo de terminología, incluidos los términos específicos del sector, la jerga específica de la empresa y los términos técnicos. Es especialmente importante para las organizaciones que operan en varios idiomas, ya que puede ayudar a garantizar que las traducciones sean precisas y coherentes.