Compartir la red es la forma más sencilla de conectar varios ordenadores a la impresora. La ventaja con esto es que se evitan los cables voluminosos y se ahorra mucho dinero que podría ser gastado en la compra de cables largos.
Sin compartir la red, la conexión entre la impresora y dos o más ordenadores requerirá que usted agregue la impresora manualmente cada vez al nuevo ordenador con el que la impresora tiene que ser conectada.
Hay una solución más simple para esto, aunque no es económica esta es la única otra opción que es fácilmente factible. Esto es mediante el uso de un USB Printer Auto Sharing Switch. Este dispositivo tiene un total de tres puertos. Dos puertos se conectan a los dos ordenadores que necesitan acceder a la impresora y el único puerto USB se conectará a la impresora.
Este dispositivo realiza la tarea de un relé. Al recibir la solicitud de impresión de un ordenador, este dispositivo conectará el ordenador a la impresora. En otras ocasiones, la impresora se mantiene inactiva. Con este dispositivo, el ordenador que accede a la impresora está restringido, eliminando así la necesidad de compartir la red.